La película: RETRATO DE UNA MUJER EN LLAMAS de Céline Sciamma
Retrata explícitamente la mirada de su creadora y de sus protagonistas. Se trata de un filme rodado desde la perspectiva de una mirada femenina. Una historia sobre el amor y el deseo, pero también sobre la confianza, el rol de la mujer y de su arte en el siglo 18. Una película que se deleita en la manera en que sus personajes observan a otros, y en cómo estos pueden transmitir todo tipo de sentimientos con solo utilizar sus ojos. Un drama excepcional, emotivo y que transmite poesía a flor de piel. La protagonista “Marianne” (Noémie Merlant), una artista que ha sido enviada en secreto a la casa de una noble italiana para pintar el retrato de su hija, la joven “Héloïse” (Adéle Haenel), quien acaba de salir de un convento y está tratando de procesar la muerte de su hermana.
El retrato que Marianne debe pintar será enviado a un posible marido para Héloïse, pero como esta se rehúsa a casarse, nuestra protagonista tiene que realizar su arte sin que la joven se entere, tratando de observarla sin que esta se dé cuenta, robándole ciertas miradas y momentos, y escondiendo su trabajo detrás de una cortina en su dormitorio. Es a través de los paseos que dan fuera de la casa que Marianne y Héloïse se van conociendo; sin entablar conversaciones profundas, sino a través de su lenguaje corporal, y por supuesto, de miradas furtivas y cada vez más cercanas. Sciamma retrata un amor intenso, inocente, y altamente erótico, transmitido a través de un lenguaje no verbal.
La intensidad de una nueva relación, un absoluto deseo por el cuerpo pero también por los labios y por el afecto de la otra persona —todo es retratado de forma muy íntima, y sin convertir a “Retrato de una mujer en llamas” en un melodrama meloso. Desgraciadamente, dicha situación se convierte en una verdadera tragedia, tanto para los personajes como para el espectador.
El libro: AUTOBIOGRAFÍA DE UN YOGUI de Paramahansa Yogananda
Un libro especial que acompañó a Steve Jobs durante toda su vida. Lo descubrió por primera vez en la adolescencia, lo redescubrió luego en su viaje a la India, y a partir de entonces lo leyó una vez al año durante el resto de su vida.
Este clásico de la literatura espiritual moderna forma parte de la lista de las 100 obras espirituales más influyentes del siglo XXI, elaborada por la prestigiosa editorial HarperCollins. Nos presenta el cautivador retrato de una de las personalidades espirituales más destacadas de nuestro tiempo, junto a Teresa de Calcuta o Ghandi. Paramahansa Yogananda, considerado el padre del yoga en occidente, recibió también el homenaje solemne del Gobierno de la India, que lo reconoció formalmente como uno de sus grandes santos.
Autobiografía de un Yogui no es sólo el atrayente relato de una vida excepcional, sino también una exposición profunda de la milenaria ciencia del yoga.